SEGUNDA PARADA: Big Bang Data.

Antes de presentar el proyecto a mis compañeros de viaje he decidido escribirlo aquí. Como  veréis

en el vídeo que os he puesto en la parte de arriba, estamos vigilados. Internet tiene un control sobre nosotros ya que nuestra información personal está al alcance de casi cualquier persona. De esta manera, toda nuestra información expuesta en la red puede ser manipulada o tergiversada. La tecnología está presente en nuestras vidas, tanto que a veces no somos conscientes de que son un peligro para nosotros, dependiendo del uso que le demos a esta. Muchas veces no nos damos cuenta del peligro que supone el estar conectados a Internet, y este peligro es aun mayor cuando se trata de menores. 

Como profesores tenemos que ayudar a los niños a concienciarse de que se debe hacer un uso responsable de la tecnología. La idea de este proyecto que nos ha tocado presentar surgió después de ir a ver la exposición artística Big Bang Data. Esta exposición se basa en la explosión de datos en la que estamos involucrados con las nuevas tecnologías. Coincidió esta exposición con las ganas de ayudar a los niños a tener un enfoque crítico sobre las tecnologías, ayudándolas así a tener un uso responsable de estas. Por lo tanto, se hizo una experiencia llamada “Proyecto Big Bang Data” en el que participaron 33 alumnas de la Facultad de Magisterio de la universidad de Gipuzkoa. Se hizo con la finalidad de familiarizarse con los peligros relacionados con el control y la privacidad de Internet y las redes sociales, además de reflexionar sobre el papel que tiene la tecnología en nuestras vidas. Por otro lado,  las alumnas elaboraron junto con un texto reflexivo, un artefacto que reflejara como veía cada una el fenómeno del Big Data.

El proyecto sobre el que nos ha tocado trabajar a sido muy interesante, me ha gustado mucho porque me ha echo reflexionar.